miércoles, 11 de mayo de 2011

Eduardo y yo

Hoy descubrí y me leí de un tirón el blog de Eduardo del Llano

Eduardo y yo tenemos poco en común

El nació en Moscú en octubre de 1962 y yo en La Habana en agosto del siguiente año

Casi seguro que fue pionero desde el primer grado, yo tuve que esperar hasta cuarto grado y gracias a la generosidad y comprensión del maestro que tuve ese año

Estudió en la Vocacional Lenin y a mí ni se me podía ocurrir semejante osadía; su familia estaba integrada y la mía desintegrada

No sabe bailar, yo sí

No le gusta el deporte, ni le emociona, a mí las dos cosas

En cuanto a música, estamos ahí, ahí, fifty-fifty: el rock que solo podía escuchar en el programa "Now", lo compartimos, el gusto por la trova tradicional y nueva (no sé nada de la Novísima), pero creo que me gusta la salsa un poco más que a él

No tuvo que ir al servicio militar obligatorio y yo tuve la obligación de pasarlo

Algo en común (que a la vez nos separa): se graduó de la carrera que yo debía haber estudiado pero no lo sabía

Eduardo tuvo una presencia social en los medios que a mí me aconsejaron no tenerla, en aras de preservar la unidad revolucionaria

Otra comunidad (esta vez de opinión): recuerdo su artículo en "El caimán barbudo" sobre el sentido de opinión de los cubanos, me pareció (me parece) original, heterodoxo y bien escrito. Disfruté, como muchos de aquellos lejanos ochenta, Nos-Y-Otros, un humor inteligente, sin concesiones

Él se quedó, yo me fui

Pero leyendo todas sus entradas hoy tuve la certeza que por encima y por debajo de las (posibles) diferencias y comunidades, compartimos algo que nos fue dado: dicho con pedantería (creo que otra cosa que compartimos): Zeitgeist

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